Neurosis digital o autismo positivista

martes, 10 de julio de 2007

Papá quiere vender el depto así que tengo que ir cuando él está de guardia. Viene una pareja, hace preguntas de metros cuadrados (no sé), esa mancha de humedad es de acá o de arriba (no sé, de arriba, creo), y otras. el tipo enciende un cigarrillo sin preguntar (suerte que fumo, aunque mi viejo ya no), después me entero que son psicoanalistas (ah, ahora sí), la vieja se pone a dar pasos de pato por el depto (está midiendo los metros de las habitaciones) y después juntos calculan los metros cuadrados (sí, puede ser, acoto). en fin, cuando les abro para que se vayan, el portero eléctrico se queda trabado, llamo al consorcio explicando que el portero eléctrico no deja de sonar y dicen que me mandan a alguien en el transcurso del día (la próxima mejor un depto con portero... aunque no sé qué es peor). pido comida china. cuatro empanaditas + chaw fan con huevo: 7 pe. i love chinese people. lástima que no tengo salsa agridulce (ni porro ni autoestima ni crédito en el celular y no hay tarjetas en ningún kiosco ni dvd en lo de mi viejo ni buenas ideas ni plata ni ninguna gran fiesta o viaje in the future).
Al menos el fútbol bien (siempre queda algún rincón para la sublimación). Vanoli se sentía mal así que lo reemplazamos por el buen defensa Martín (cuñado de Ali). La primer media hora presentaron un equipo armadito, Funes tapando todo en el arco y un planteo defensivo (al mismo tiempo jugaba Perú-Argentina, el desarrollo fue similar), bueno, esto era fútbol 5 (y somos 'intelectuales', así que las distancias eran grandes), pero no podíamos hacer un gol, ellos encontraron huecos y se pusieron dos arriba; empecé a putear a todos, nos pusimos nerviosos pero nos ordenamos, empezamos a pasarla y, una vez que le rompimos el invicto a Funes, los goles empezaron a venir (además ellos a los cuarenta se quedaron sin aire y los pasamos por arriba). Incardona y Funes, otra vez lo más digno del equipo rival. Ganamos por nueve.
El libro de Sudamericana sigue sin llegar pero al menos estoy en lo de papá que lo tiene, así que sigo con mi lectura de En Celo: por ahora de lo que leí me gustó mucho el de Terra, el de Mairal (que lo había escuchando en Los Mudos pero releerlo fue igual una experiencia interesante), el de Bruzzone, el de Suárez, el de Ali y el prólogo de Grillo.
Hoy, martes, duda triple: ir a mi anteúltima clase de teatro, ir a escuchar a Chitarroni y a Funes al Gato Negro en el cumple de año y medio de la revista Los Asesinos tímidos, que creo que dirige el amigo Juanjo Burzi, o ver Brasil-Uruguay, semi de la copa América, y ahorrarme la cuota de teatro (y las saladas consumiciones de El Gato) para comer comida china (que no sea un miserable chaw fan de arroz con huevo).
En fin, como dijo el superyoico San Agustín, elige y hazte cargo de tu elección.
Y como decían los libertinos de Virus: hay que salir del agujero interior.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿los libertinos?
boah

Che, quedáte viendo el doparti con el chaw fan... ¿así me contás qué onda?

Ah, ¿pagaste x mí el domingo?

lenguaviperina dijo...

no, voy a la lectura, así socializo con otros/as bloggers.
no pagué por vos, papi, habrá sido otro.